Es un seleccionado que hace historia, por eso esta derrota lastima pero no sorprende. Argentina, por primera vez entre los doce mejores de un mundial de handball, se enfrentaba a Croacia, el subcampeón mundial y la derrota, entonces, era de esperarse. Fue abultada, es cierto, pero estos chicos ya están más allá de un resultado. El seleccionado masculino cayó 36-18 con uno de los rivales más duros del certamen que se disputa en Suecia y mañana intentará buscar revancha ante Dinamarca, el rival que parece ser el más difícil.
Llegaba envalentonado el equipo de Gallardo. Es que tras aquel resonante triunfo sobre el local y candidato al título, llegó el triunfo sobre Chile y la clasificación a la segunda ronda para ponerse, por primera vez en la historia, entre los doce mejores. Hoy, el equipo nacional se vio superado durante todo el partido, pero aún así no paró de dar batalla.
El primer tiempo terminó 19-6 a favor de los croatas, que eran más rápidos y aprovechaban las contras para ampliar la diferencia. La máxima ventaja, igualmente, la sacaron en el complemento, cuando a los seis minutos se pusieron 14 puntos arriba, con un contundente 22-8.
Argentina no se dio por vencida, como en ningún partido de este Mundial, y con un arquero como Matías Schulz que no se achicaba ni ante Ivano Balic, figura de Croacia y uno de los mejores jugadores del mundo. Sin embargo, la ventaja ya era irremontable y la diferencia de doce que hubo durante todo el encuentro no pudo ser minimizada. Fue derrota por 36 a 18 para los de Gallardo, que mañana tendrán un duro compromiso contra Dinamarca, para cerrar el martes su participación en la segunda fase ante Serbia, el rival menos complicado de los tres que enfrenta.