BRUNO FERRARI.
PASION HANDBALL.
El frio apremiaba en el playón del club, la pelota en los dedos era como chocar contra el Titanic, el pobre arquero haciendo malabares para parar con las partes mas mullidas de su vestimenta, el invierno se presenta con todo en esta época. No falta el que aporta que este deporte se inventó indoor justamente por la imposibilidad de practicar otros al aire libre en países donde la nieve es lo mas leve que trae la estación blanca.
En ese momento me puse a reflexionar, y me acordé de Ferro Carril Oeste. Resulta que la institución de Caballito tuvo un momento de esplendor en el handball latinoamericano, ganando Sudamericanos y dominando la actividad, con Képiro, un muy jóven Pablo Gonzalez, Luis Simonet y compañia, coincidiendo esta época con la de Timoteo en el equipo de fútbol y León Najnudel en el de Basquet.
La historia moderna, actual de Ferro marca que tiene campeones a los Juveniles, marcha segundo en el promedio de inferiores A caballeros y segundo (con una partido mas) en Liga de Honor Caballeros.
Tiene mucha cantidad de minis e infantiles, yo creo que el éxito en estas categorías debe medirse por la cantidad y la mantención de la misma, y además juegan muy bien. Lo que se dice "el semillero".
Ferro es una institución que aporta muchos jugadores a las selecciones argentinas (el Negro García es actualemente el máximo exponente), y cuando le ha tocado pasar épocas de vacas flacas siempre fueron un equipo ordenado, coherente que podría no sacar resultados pero jamás perder la línea de trabajo.
En inferiores siempre han trabajado con mucha coherencia, de la mano de Mario Besasso (Maiko) y Martin Duhau, dos excelentes entrenadores que se manejan como verdaderos profesionales.
Ferro sufrió la desmantelación de su institución por las malas gestiones, relegando a su querido equipo de fútbol al descenso inevitable. Y podríamos preguntarnos como es que una institución que hace no tanto tiempo fue modelo de gestión en Sudamérica no haya podido hacer lugar en el Etchart para la práctica del handball o al menos techar el playón u otro espacio.
¿Y que quiero decir con todo esto? Que Ferro siempre trabajó a la intemperie, nunca tuvo techo, y de ese glorioso playón sacó una enorme cantidad de jugadores y disfruta de un excelente presente. Entonces muchachos y muchachas handbolistas, ya saben, el frio no es una excusa para no entrenar!
LA NOTA ORIGINAL EN PASION HANDBALL.